Bibliotecarios FC sigue dando guaraca

Un Equipo Unido

A la misma hora en que Universidad Católica perdía puntos jugando en casa contra su similar brasileño, el equipo de Bibliotecarios FC mantuvo el invicto frente a LUN en un partido lleno de goles y complicaciones.
Los goles corrieron por parte de las reconocidas estrellas del balompié bibliotecológico: Tungagol, que lento pero seguro a recobrado la magia y el dominio que lo hiciera famoso en antaño, en aquellas jornadas universitarias; Leo Urrutia, que corrió todo el partido, no solo anotando sino que habilitando a sus compañeros, y que aún le quedaron piernas después del partido para ir a comprar refrigerios; y la figura del encuentro Richard Oyarce, que calzando zapatos nuevos dió la tranquilidad al equipo marcando el 2 x 0.
Las complicaciones se vivieron desde antes del encuentro: además de las sabidas bajas de Vargas y Chankk, se sumó a último minuto la ausencia de Dinamarca, lo que complicó a los organizadores del match; el equipo de LUN, por su parte, presentó sólo un puñado de jugadores, por lo que se optó por jugar en media cancha y parchar su equipo con nuestros propias jugadores; ya en el segundo tiempo, dos jugadores rivales sufrieron desgarros, lo que significó prestarles otro jugador, y OBVIAMENTE el equipo de Bibliotecarios FC facilitó a Tungagol, a Richard Oyarce ni cagando.

Frase para el Bronce

Más allá del marcador, quedará en los archivos del equipo la gran frase emitida por el defensa Daniel Alvarez, quién, en su afán de motivar y ordenar a su equipo, les propfirió que "Hagamos el primero, después saldrá el segundo". Y cuando creyó que nadie lo había oído, o que nadie había reparado en su gran frase, las risas de sus compañeros le enrostraron que era digna para la sección "Grandes Pensadores".

Invicto y Buen Debut

Mantener el invicto fue uno de los episodios más importantes de la noche, pero también hubo más: Todos los jugadores que debutaban prendas de vestir, debutaron con éxito y marcaron goles. Tungagol debutó sus zapatos adidas, que compró a precio de caramelos y además le regalaron un bolso, y marcó sendos goles en ambas porterías; Richard Oyarce, ex promesa y actual figura del equipo, anotó con sus zapatos nuevos, que empezaron tasados en $4000 al inicio del partido, y al terminar iban en $12.500; César Biernay debutó sus zapatos nuevos con un gol rasante, previa habilitación de Leo Urrutia; y Gustavo Crisóstomo, quién debutó sus medias negras, anotó un gol, pero la barra no le gritó GOL, sino MAR PARA BOLIVIA, MAR PARA BOLIVIA.

Richard Oyarce, Capítulo Aparte

Tómelo como quiera, pero anoche el último en salir de camarines fue el delantero Oyarce, lo que originó el aplauso espontáneo de sus compañeros de equipo.
Si tiene algo más que agregar de este gran jugador y del vibrante encuentro de anoche, lo invito a dejar sus comentarios. Y no se olvide que hoy se nos viene otro. Aún tiene tiempo de lavar su camiseta, pantalón y medias, o al menos, "pásele una aguita".